miércoles, 11 de febrero de 2015

Not quite Hollywood!: The wild, untold story of Ozploitation (Mark Hartley, 2008)

Recomendando la neozelandesa y peterjacksoniana "Housebound" me he acordado de este fantástico documental que vi hace unos meses (lo vi en sesión continua junto a "Rewind this!"), un maravilloso documento sobre el auge del cine de acción y explotación australiano de los años 70 y 80, del mismo director de la reciente "Electric boogaloo" dedicado a la Cannon Films. A través de la habitual, interminable en este caso, retahíla de entrevistas e imágenes de archivo, enfundada en una hermosa infografía pulp, se van desgranando los grandes éxitos de ese cine entusiasta, barato y de género que se produjo durante los desenfrenados 70s. Mucho más allá de la Cúpula del Trueno (aunque a menudo bajo su influjo), directores como Brian Trenchard-Smith ("Dead-end Drive-In: Campo de Exterminio", "Los bicivoladores", "Night of the demons 2", "Leprechaun 3"), George Miller (las tres de "Mad Max", "Las brujas de Eastwick"), Terry Bourke ("Night of fear", "Inn of the damned"), Bruce Beresford ("The adventures of Barry McKenzie"), John B. Murray ("The naked bunyip") o Richard Franklyn ("Patrick"), y autores-fetiche como George Lazenby o Barry Humphries, asistimos a la historia del cine de expotación sexual, el thriller, el horror o la nueva ola kiwi, mientras tomamos nota de docenas de películas increíblemente campy o repletas de grumo y cachondeo. A destacar los comentarios del fan número 1 del cine, Quentin Tarantino, saltando en el asiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario